Los dolores de cabeza frecuentes son un efecto muy habitual del daño cerebral adquirido. Pueden variar en intensidad y ser desde ligeros hasta totalmente incapacitantes, y las situaciones de estrés y tensión pueden empeorar el dolor.
Buenas prácticas
Recurrir a las estrategias de manejo del estrés: técnicas de relajación, meditación o ejercicios de respiración.
Evitar, en lo posible, situaciones de estrés, mediante el establecimiento de una buena planificación y el respeto de determinadas rutinas.
Administrar la medicación pautada por su médico.
Complementariamente, véase el apartado dedicado a las técnicas de relajación en el tema de este Banco de Buenas Prácticas sobre "Estrategias Reactivas".