Éste sería el perfil de una óptima conexión emocional entre el profesional y cada usuario particular:
Aunque esta definición se refiere a las relaciones individuales –de un profesional con un usuario– y no al vínculo emocional del profesional con la familia en su conjunto, ambas cosas están estrechamente relacionadas.
Los miembros de la familia se fijan en cómo los otros miembros de la familia hablan sobre el profesional cuando éste no está presente y suelen poner atención a cómo cada uno de ellos interactúa con el educador o el psicólogo durante las entrevistas conjuntas.
Generalmente, los miembros más motivados de una familia se animan cuando ven que los otros miembros con menos motivación o más reacios van sintiéndose más cómodos y cercanos al profesional y que éste empieza a llegar a aquellos que estaban reticentes, inseguros, asustados o a la defensiva.
En general, los resultados de la investigación en el ámbito de la psicoterapia pueden generalizarse a la intervención familiar, y muestran que los clientes valoran a los terapeutas que son cálidos, activos, con los pies en la tierra, informales, de confianza, optimistas, seguros, con sentido del humor, interesados por ellos y comprensivos.