a) Multidisciplinariedad y diversidad
La riqueza de la diversidad... así se habla hoy para reforzar lo positivo de una sociedad. En efecto, la diversidad cultural, académica, cultural, generacional, potencia la generación de ideas cuando dicha diversidad es canalizada adecuadamente hacía un resultado común (resolver esa necesidad apremiante, en el caso de la innovación social).
b) Integración
La yuxtaposición no es suficiente. Se requiere trabajo en equipo. Se pueden tener todos los ingredientes para “algo” pero hay que ponerlos de la forma adecuada, en el orden correcto y en la proporción justa. Mientras la innovación tecnológica requiere el desarrollo de ventajas competitivas y de un ambiente hostil, la innovación social se fundamenta en la generación de solidaridades y de confianza.