Discapacidad intelectual, Adultos, Tutela, Intervención, Reforma, Normativa, Régimen jurídico, Justicia, Apoyo, Toma de decisiones, Incapacidad jurídica, Trabajo social, Registro, Procedimiento, Responsabilidad jurídica, Coordinación, Buenas prácticas, Recomendaciones, Madrid, España
La reforma en 2021 de la legislación estatal para el apoyo a las personas con discapacidad en el ejercicio de su capacidad jurídica estableció un nuevo paradigma que trata de convertirlas en protagonistas activas de su proyecto vital, respetando su voluntad, deseos y preferencias. Así, este código de buenas prácticas pretende dar respuestas a algunos de los interrogantes que suscita la aplicación del nuevo modelo, tanto desde la perspectiva jurídica como de la social. Desde la óptica social, se define el modelo de comportamiento en todas las fases de la intervención: la acogida de la persona, el establecimiento del vínculo con el equipo de profesionales, la mejora en los procesos de información y comunicación, el acompañamiento y el trabajo con la familia. Por su parte, el enfoque jurídico analiza los principales conceptos legales del nuevo marco normativo adentrándose especialmente en los casos de curatela. También se describen en detalle las obligaciones ante situaciones de urgencia, administración provisional o autorizaciones judiciales. El documento busca mejorar de forma continuada la intervención profesional con las personas adultas con discapacidad y con ello, su bienestar y calidad de vida.